martes, 26 de mayo de 2009

la rumba del piano


Hermanos de soledad,aquí hoy estamos los dos bajo esta luz de rubí, entre esta gente nueva. Hoy yo te quiero cantar, madera que hablas por mí mezcla de yegua y diván, refugio, lengua y fusil. Y si me aplauden a mi también te aplauden a vos, y si me caigo una vez también se cae tu honor. Y ya que hablamos de amor, pinceles y monedas porque no hablamos de vos, cuerpito blanco y negro.Tus cuatro patas piden fiestas, entonces hay que dársela, Oh! se va poniendo calentito el aire, pide más y más. Claro, se viene la rumba del piano, claro rumba mamá. Claro, claro claro, se vino la rumba del piano, claro; rumba mamá.Mi piano sabe de mí, de cigarrilos que queman de cables, putas y Dios, y de esa gente que espera. El otro día lo vi corriendo atrás de su amor, una pianola azul, muy vieja adulta y sin voz. y se abre como una flor ante un acorde sutil, y cierra su corazón si lo abandono en abril. Mi piano un poco soy yo, yo soy un poco de él, hermanos de prisión, viajando en un carrousel. Tus cuatro patas piden fiesta entonces hay que darsela, Oh!. Sólo te pido un poco de aire para respirar y dejas entrar aquella melodía...